INNBIT

Metolodogías

ágiles

Las metodologías ágiles son una serie de técnicas para la gestión de proyectos que han surgido como contraposición a los métodos clásicos de gestión. Las metodologías ágiles surgieron en el ámbito del desarrollo de software, pero gracias a su utilidad, han podido ser aplicadas a otro tipo de proyectos.

Existe una serie de principios, llamada el manifiesto ágil; toda metodología que se considere ágil debe de cumplir con este manifiesto, que estipula 4 principios:

  1. Los individuos y su interacción, por encima de los procesos y las herramientas.
  2. El software que funciona, frente a la documentación exhaustiva.
  3. La colaboración con el cliente, por encima de la negociación contractual.
  4. La respuesta al cambio, por encima del seguimiento de un plan.

Las metodologías ágiles generan documentación estratégica y control sobre el proyecto, esto se debe a que minimiza el impacto de las tareas que no son totalmente imprescindibles para conseguir el objetivo del proyecto. Las metodologías ágiles pretenden aumentar la eficiencia de las personas involucradas en el proyecto y es por ello que logramos como resultado minimizar costos.

Las metodologías ágiles no son mejores que las tradicionales y viceversa, dependiendo del tipo de proyecto, se sugiere la implementación de tradicionales o ágiles, e inclusive hasta combinando ambas metodologías, puede existir una solución más precisa.

Uno de los principales motivos para emplear metodologías ágiles son los proyectos tecnológicos. Cada metodología tiene sus fortalezas y debilidades, pero no son excluyentes. Como mencionamos anteriormente, dependiendo del análisis de cada proyecto, podemos adoptar una, o varias, en función de las características del propio proyecto y del equipo. Aquí mencionamos las metodologías ágiles que tienen mayor aplicación:

  • SCRUM: proceso que se usa para minimizar los riesgos durante la realización de un proyecto, de manera colaborativa. Entre las ventajas se encuentran la productividad, calidad y que se realiza un seguimiento diario de los avances del proyecto, logrando que los integrantes estén unidos, comunicados y que el cliente vaya viendo los avances. La profundidad de las tareas que se asignan en SCRUM tiende a ser incremental; es perfecto para empresas de desarrollo de software orientadas a varios clientes
  • KANBAN: con Kanban, el trabajo en curso / Work In Progress (WIP) debería limitarse y sólo deberíamos empezar con algo nuevo cuando un bloque de trabajo anterior haya sido entregado o ha pasado a otra función posterior de la cadena.
  • Xtreme Programming: proceso que se aplica en equipos con muy pocos programadores quienes llevan muy pocos procesos en paralelo. Consiste entonces en diseñar, implementar y programar lo más rápido posible, hasta en casos se recomienda saltar la documentación y los procedimientos tradicionales. Se fundamenta en la capacidad del equipo para comunicarse entre sí y las ganas de aprender de los errores propios inherentes en un programador. La gran ventaja de XP es su capacidad de respuesta ante imprevistos, aunque por diseño es una metodología que no construye para el largo plazo y para la cual es difícil documentar.
    XP es un método estupendo para equipos extremadamente pequeños que se centran en un solo cliente.

Los desarrollos llevados con metodologías ágiles eliminan procesos burocráticos (siempre y cuando las políticas del cliente lo permitan) además, refuerzan las entregas múltiples, la lista de funcionalidades del acuerdo de entrega, esto implica un enfoque para desarrollar la funcionalidad que se considere prioritaria para el proyecto y así se puedan focalizar correctamente los esfuerzos desde el inicio. El desarrollo ágil aumenta la productividad ya que es posible procesar con mayor simplicidad y en tiempos de entrega más dinámicos; de igual forma, simplifica el manejo de la sobrecarga de procesos, las metodologías por iteración simplifican el proceso de entrega versus validación lo cual además permite adoptar cambios sobre la marcha del alcance del proyecto.

Gracias a las metodologías ágiles existe una mejor gestión del riesgo, cuántas veces hemos sido testigos que no siempre se logra cumplir con las metas de lanzamiento cuando se trabaja con software, mientras más lejanas sean las entregas contra cliente, se maximiza el riesgo de potencial desviación de la entrega contra la definición del proyecto inicial.; gracias a las metodologías ágiles es posible repasar en ciclos un progreso continuo de entregables y productos semi-cerrados. Cuando fallan las entregas, la metodología ágil permite ajustar el ciclo de trabajo para enfocar el talento en zonas de mayor o menor riesgo a justificación de defender un proyecto en su totalidad.

Innbit es la opción para emplear las metodologías ágiles en los proyectos de las empresas, estas metodologías hoy en día han demostrados ser imprescindibles en un mundo en el que nos exponemos a cambios de forma recurrente. Actualmente, los programadores saben que lo que es la última tendencia hoy puede que no exista mañana y es por ello que empleamos metodologías ágiles con enfoques menos tradicionalistas gracias a nuestro experimentado, organizado y multidisciplinario equipo de trabajo.

¡No esperes más!

Déjanos tus datos para comenzar el cambio
que siempre has deseado y que tu negocio necesita

Recibe más información...

Solo acepto números!

Al enviarnos tu correo, estas aceptando los términos del aviso de privacidad